Por lo tanto para conseguir un empleo pues antes se recomienda tener una profesión, esta vez derribaremos mitos de como están catalogadas las carreras para hombre y su vez para mujeres.
Hombres y mujeres que se atreven a estudiar carreras que tradicionalmente pertenecen “al otro sexo”; clasificación que pasa más por un tema social que por condiciones netamente académicas. Se sienten extraños, perdidos, a veces con ganas de partir. Sin embargo su vocación es superior a los miedos y a los prejuicios.
Se presentan como "derribadores de mitos" y no ocultan su orgullo por los planes que estudian.
Y los expertos también apelan a la valentía. A su juicio los hombres y las mujeres se complementan en las aulas: las mujeres suelen ser más aplicadas y efectivas a la hora de trabajar y los hombres aportan su simpleza, tolerancia y cooperación.
"Los hombres que estudian carreras de mujeres, y viceversa, buscan ir más allá. No se quedan sólo en el estudio. Es un motor en sus vidas", concluyen estudios extranjeros. El llamado entonces es a informarse, tener coraje y atreverse a vivir la vocación sin prejuicios.
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